GRACIAS POR EXISTIR

CARTA DE UNA ABUELA

Al tenerte a ti …. , aprendimos amar a alguien más que a nosotros mismos, fuiste un gran regalo después de tantos intentos que fracasaron.

Al nacer tus hijos, Eva y Jorge, el amor se ha multiplicado no por dos, sino infinitamente.

Llegasteis al mundo demasiado pronto ( 29 semanas es muy poco tiempo), pero Eva tenía unas ganas locas por salir así que a ti Jorge, con lo tranquilo que estabas dentro de tu madre, no te quedó otro remedio que salir también

Ha costado mucho llegar al momento actual, y las lágrimas que he derramado cuando no me veía vuestra madre, cuando estaba sola, solo lo sabe Dios nuestro Señor y yo.

Pero ya, poco a poco, todo va pasando y ahora es el momento de alegrías, de dar gracias al Señor porque nos habéis colmado de Amor y Bendiciones.

A partir de este instante nos toca a todos el acompañaros en vuestro aprendizaje. Os van a pasar cosas muy buenas, que os encantaran, y otras menos buenas de las que aprenderéis algo, pero siempre vamos a estar a vuestro lado, riendo cuando estéis contentos, consolándoos cuando tropecéis y malcriándoos, que para eso somos abuelos; a vuestros padres les tocara el ponerse serios.

Y nada más, gracias por existir y hacernos el regalo más grande que nunca habríamos podido imaginar y encima por partida doble.

Vuestros abuelos que os quieren

BIENVENIDOS, SOFÍA Y CÉSAR

Con gozo habéis vivido en el seno de vuestra familia el nacimiento de estos niños.

Con gozo venís ahora a la Iglesia a dar gracias a Dios y celebrar el nuevo y definitivo nacimiento por el Bautismo.

La celebración del bautismo concluye con una preciosa bendición a la mamá, al papá y a los familiares.

 

El Señor todopoderoso, por su Hijo, nacido de María la Virgen,
bendiga a esta madre
y alegre su corazón con la esperanza de la vida eterna, alumbrada hoy en sus hijos, para que del mismo modo que le agradece el fruto de sus entrañas, persevere con ellos en constante acción de gracias.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

 

 

 

El Señor todopoderoso,
dispensador de la vida temporal y la eterna,
bendiga a este padre,
para que junto con su esposa sea el primero que, de palabra y obra, de testimonio de la fe ante sus hijos, en Jesucristo nuestro Señor. Amén.

 

 

 

El Señor todopoderoso,
que nos ha hecho renacer a la vida eterna por el agua y el Espíritu Santo,
bendiga a estas familias,
para que, siempre y en todo lugar, sean miembros vivos de su pueblo;
y conceda la abundancia de su paz a todos los aquí presentes, en Jesucristo. nuestro Señor. Amén.

 

 

 

bendición
de Dios todopoderoso,
Padre, Hijo
y Espíritu Santo,

descienda sobre vosotros. Amén.

 

 

 

 

 

 

 

 


CANCIÓN DEDICADA




TEXTO LEÍDO POR LA ABUELA

“Hijo es un ser que nos prestaron para un curso intensivo de como amar a alguien más que a nosotros mismos, de cómo cambiar nuestros peores defectos para darles los mejores ejemplos y de nosotros aprender a tener coraje.

Ser padre o madre es el mayor acto de coraje que alguien puede tener, porque es exponerse a todo tipo de dolor, principalmente el de la incertidumbre de estar actuando correctamente y del miedo de perder algo tan amado.

¿Perder? ¿cómo? No es nuestro, ¿recuerdan? Fue apenas un préstamo”….
Cierto, pero es un préstamo que llega a convertirse en el don más preciado que jamás llegamos a tener en el efímero tiempo que dure el empréstito. Un préstamo por el que damos la vida, sabiendo que hay que devolverlo.

Un préstamo sin intereses, pero cuyo cuidado lleva implícito el más alto sacrificio y la defensa mas sólida! Cuida tu préstamo, muchos lo querrán, otros lo odiarán, pero para ti no tiene precio”.


PALABRAS DE LOS PAPÁS PARA SUS NIÑOS

Carta a nuestros hijos Sofía y César.

Es tres de Octubre de 2015 y estamos reunidos, familia y amigos, para y por vosotros hijos nuestros.

Es el día de vuestro bautizo, es el día en que os damos la bienvenida a la vida cristiana, a la VIDA.

Hace un tiempo decidimos ampliar la familia, pero os podemos asegurar que jamás habríamos imaginado lo que eso supondría.

Estamos teniendo una vida de la que no nos podemos quejar. Llegó el que creíamos el día más feliz de nuestras vidas…. NUESTRA BODA. Creíamos que esa era la máxima felicidad a la que se podría llegar. Lo creíamos hasta que llegasteis vosotros; no existen palabras en el mundo para expresaros la felicidad que nos da el abrazaros, cuidaros, besaros, consolaros, quereros…. Sois nuestra vida.

Queremos deciros que, en esta vida que empezáis, os van a pasar muchas cosas, unas buenas que os encantarán y otras no tan buenas; pero de todas ellas deberéis aprender algo.

Queremos deciros….. no, queremos aseguraros que SIEMPRE estaremos a vuestro lado para consolaros en los momentos difíciles, y reírnos y disfrutar en los buenos momentos.

Queremos deciros, que os vamos a dar lo mejor de nosotros siempre.

En vuestra infancia os acompañaremos muy de cerca, os motivaremos, os enseñaremos todo lo que necesitéis….

En vuestro paso por la adolescencia, aunque os separéis un poco de nosotros y queráis experimentar vuestras propias experiencias, nosotros seguiremos a vuestro lado aunque no queráis, siempre atentos para recogeros y consolaros cuando tropecéis.

Cuando lleguéis a la edad adulta estaremos junto a vosotros para seguir escuchándoos y ayudándoos en la medida de lo posible.

Y para finalizar esta pequeña carta, queremos daros como primer consejo, que disfrutéis de la vida y la miréis siempre con una sonrisa, y aprendáis de todo lo que os va sucediendo.

César y Sofía, no hay día que no demos gracias a Dios por traeros a nuestras vidas.

De antemano, gracias por existir y ojalá podamos llegar a disfrutar con vosotros de vuestro propios hijos.

Vuestros padres, que os quieren.