QUEDE USTED CON DIOS

FUNERAL DE DON FRANCISCO

– Señor, buenos días.

-¿Es usted don Francisco ( y digo USTED y digo DON porque así tratamos en mi pueblo a los padres, a los maestros a los médicos al cura y a los señores de bien)

Y seguro que me contestaría:
-Servidor de usted

Por eso he creído que la lectura más apropiada para hoy era este versículo del Apocalipsis de San Juan (14,13)

“Oí una voz del cielo, que decía:

«Escribe: ¡Bienaventurados los muertos, los que mueren en el Señor! Sí —dice el Espíritu—, que descansen de sus fatigas, porque sus obras los acompañan».

Como incansable lector, gran filósofo, con el título de doctor y profundo creyente, entenderá mejor que nosotros que “nacemos para morir, pero morimos para resucitar”.

Resucitó, cuando los suyos pensaban que todavía le quedaban varias lecciones que dar como lo hizo durante toda tu vida, con el ejemplo, mostrando nuevos caminos, aspirando la vida hasta el último sorbo y con una fe irrenunciable y profunda en el Dios de la vida, que es la mejor herencia que jamás nadie podrá dejar.

Ya me han contado que fue usted un padre alucinante. Que Fernanda ha tenido una suerte inmensa y usted con ella. Que nunca han visto dos personas que se complementaran tan bien.

Cuando me hablan de bodas de Oro yo me acuerdo de las suyas. Qué suerte tuve de poder participar de ese momento entrañable con toda la familia.
Desde entonces os traslado, de un lado para otro, con mi imaginación, desde la capillita de la ceremonia a los primeros bancos de la Misa de Una.
Me daba mucha seguridad veros mezclados con los más pequeños. Yo seguiré viéndoos allí a los dos.

Gracias, señor Francisco, ya puede irse, pero no se marche usted muy lejos porque los suyos van a seguir necesitándole.
Que todavía quedan muchas dudas para afrontar, muchas cosas que aprender y un mundo entero por construir. Y es que les ha puesto usted el listón muy alto.

Con su permiso les diré a los suyos que vivan, que no lloren, que luchen, que la vida no es fácil para nadie, pero que unidos la esperanza se les hará amiga cada mañana y el camino diario se tornará casa, pan, periódico y escuela.

Don Francisco, le imagino ahora acurrucado en el corazón de Dios, Padre y Madre, en posición fetal, reviviendo su camino de fe desde la maravillosa Alhambra hasta la majestuosidad del Pilar y pidiéndole que llene el corazón de sus familiares de paz y vida resucitada.

“Dios le ha colocado en su regazo y usted, acurrucado entre sus brazos, le está susurrando, muy bajito, la canción aquella:

Padre, me pongo en tus brazos,
Haz de mí lo que tú quieras.
Padre, me pongo en tu regazo,
Como un niño débil y frágil,
Soy tu pequeño.

-¿Es usted don Francisco? ¡A sus ordenes!
Usted sirvió, amó y creyó, y ahora vive eternamente resucitado.

Quede usted con Dios, Don Francisco.

YO HICE EL CURSILLO PREMATRIMONIAL


Querido P. J…:

Tenía pendiente escribirle desde hace tiempo, como tengo niños pequeños y mucho trabajo, nunca saco un momento ni para escribirle un email. Hoy he querido sacar un rato porque en el último mail que nos ha enviado (siempre los leo) me ha sorprendido que nos decía que afrontaban el próximo cursillo con «mucha tarea y pocas fuerzas», inmediatamente me di cuenta de que ustedes necesitan que nosotros, los novios que hemos recibido el cursillo, les contemos los frutos de su labor, para poder alimentarles y recargarles de energía.

Así que le cuento mi experiencia, perdone que le suelte un rollo larguísimo pero son 7 años de matrimonio: mi marido Z y yo asistimos al curso para novios en la primavera de 2009, nos casamos ese mes de julio. Tenemos dos hijas, la tercera viene ya de camino. Tuvimos la suerte de disfrutar de Carmen, hoy es un ángel que cuida de mi familia (creo que ya era un ángel entonces), hablo con ella muchas veces.

Para mi aquel fin de semana fue un encuentro con Dios en el que me dijo a mi personalmente cómo debía enfocar mi matrimonio (no lo llevaba bien enfocado, menos mal que caí en su parroquia). No paré de llorar en todo el curso mientras escuchaba, creo que mi alma estuvo muy despierta y por eso lloraba y lloraba.

Le aseguro que algunas de las cosas que nos dijeron allí han marcado mi vida a partir de entonces. Recuerdo en concreto la frase: «no tengáis miedo a la austeridad», «esa sencilla puerta que hay ahí cumple su función, no tiene que ser de caoba, o de diseño, tan sólo cumplir su función»… en ese momento me pareció un poco absurdo; yo venía de casa de papá y mamá y no entendí la importancia.

Pero con el tiempo aquello ha revolucionado mi vida: recibimos sueldos pequeñitos pero tenemos 3 hijos gracias a la austeridad, me siento tranquila gracias a la austeridad, no compito con nadie gracias a la austeridad… ¡me siento libre! a medida que aumentamos la familia cada vez vemos que necesitamos menos cosas, de verdad. Los hijos son la verdadera riqueza y si necesitas muchas cosas materiales no puedes acogerlos y viceversa.

Otro pilar importantísimo qué recibí allí y sólo allí, fue la idea de pensar únicamente en el otro: Dios te ha elegido para servir al otro, olvidándote de ti mismo (le aseguro que las novias preparando su boda vamos pensando en todo menos en servir al marido…). He comprobado que ésta es la única fórmula válida para que un matrimonio esté unido. Los dos tienen que abrazar ese compromiso y si no el matrimonio se rompe (desgraciadamente lo he visto en amigas y familiares).

Nosotros éramos católicos un poco «despistaos», aunque siempre he tenido presente a Dios en mi vida, sobre todo desde entonces, vivo con Él.
Ah! otra cosa que recuerdo y que nos ha acompañado: «Levanten la mano quienes piensen tener imágenes de Jesús, de la Virgen, a la vista en su casa”. Tampoco me pareció demasiado importante, nosotros levantamos la mano porque teníamos un crucifijo de marfil que pensábamos colgar en algún sitio decorativo.

Pero con el tiempo pusimos aquel crucifijo en la entrada de casa, uno más grande en nuestro dormitorio, un San José en el salón, las niñas tienen su Niño Jesús para darle besitos antes de dormir…Con los años me doy cuenta de lo que te acompañan estas imágenes, les pido que nos protejan, parece que están observando nuestra vida en esa casa… es curioso que se mencionase eso en el curso.

Otra cosa que me está sirviendo mucho como madre, recuerdo que lo dijo usted: «los niños y los jóvenes van a donde encuentran cariño». Esto es clave para mí. Y, aunque parezca mentira, a menudo se nos olvida.

No sé padre, tengo la sensación de que nuestro matrimonio está bendecido desde entonces (el noviazgo no había sido muy ejemplar). Pero creo q Dios está viviendo el matrimonio día a día con nosotros porque yo le pido constantemente que se quede, que me de más amor para dárselo a mi marido, más energía para criar a mis niñas… y Dios siempre da la cara por mí.

En fin, que por favor no desfallezcan en esta labor, que muchos se separan pero en otros la semilla florece, da fruto, y no olviden que no hablan ustedes, que sólo son instrumento, que es Dios quien se dirige a los novios para que se casen dignamente.

GRACIAS y un abrazo,

X y Z

SEMANA DEL CORAZÓN DE MARÍA

Celebración de la Semana de preparación a la fiesta del Corazón de María.

Durante la semana en todas las Eucaristía se hará una mención especial, siguiendo el díptico preparado para cada día. Con saludo, preces y oraciones especiales para cada día.


PRECES 1

Dirijamos a Dios Padre nuestra oración confiada por mediación del Inmaculado Corazón de María, que intercede, sin cesar, por sus hijos necesitados.

Por la santa Iglesia: para que, confiada en el Corazón de María, sea hogar acogedor, donde toda persona experimente el amor de Dios Padre, roguemos al Señor.

Por los que se entregan al servicio de los demás: para que con el ejemplo del Corazón de María en la visita a su prima Santa Isabel, se alienten y fortalezcan en su entrega, roguemos al Señor.

Por las familias cristianas: para que, puestos los ojos en Nazaret, donde el Corazón de María educó a Jesús, mantengan su fidelidad y eduquen en la fe a sus hijos, roguemos al Señor.

Por los consagrados a Cristo Jesús: para que siguiendo las huellas del Corazón de María, sepan ofrecer al Pueblo cristiano un ejemplo de entrega generosa y serena, roguemos al Señor.

Por los jóvenes: para que el Corazón de María los acompañe en su vida y los eduque en el amor limpio, fuente de paz y de verdadera alegría, roguemos al Señor.

Por nosotros aquí reunidos: para que aprendamos a confiar en la Palabra de Dios y a guardarla en nuestro corazón, roguemos al Señor.


PRECES 2

Dirijamos a Dios Padre nuestra oración confiada por mediación del Inmaculado Corazón de María, que intercede, sin cesar, por sus hijos necesitados.

P: Señor, Tú que nos diste a María por madre, …
T: concede por su mediación salud a los enfermos, consuelo a los tristes, perdón a los pecadores y a todos la abundancia de salud y de paz.

P: Haz, Señor, que tu Iglesia tenga un solo corazón y una sola alma por el amor….
T: Y que todos perseveremos unánimes en el servicio a los demás y en la oración con María, la madre de Jesús.

P: Tú que hiciste de María la madre de la misericordia…
T: Haz que todos los que viven en peligro o tienen dificultades sientan su protección maternal.

P: Tú que encomendaste a María la misión de madre de familia en el hogar de Jesús y de José..
T: haz que por su intercesión las madres fomenten en sus hogares el amor y la unidad.

P: Tu que encomendaste a María el cuidado de Jesús para que le ayudará a crecer en edad, sabiduría y gracia…

T: Concede, por su intercesión, a nuestros catequistas luz, fortaleza y mucha fe para que transmitan con alegría, a los niños, el mensaje del reino del amor.

Padre, escucha nuestra oración que te dirigimos por medio de Jesucristo nuestro Señor.


PRECES 3

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA.

Para que mi fe sea más fuerte que mis pensamientos.
Para que mis dudas no se impongan a la fe.

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA.

Para que mi fuerza no se resista a la invitación de Dios.
Para que no me conforme con los mínimos.

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA.

Para que no me embargue el pesimismo.
Para que, lejos de decir «no» siempre diga «sí».

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA.

Para que la alegría me anime en el seguimiento a Jesús.
Para que la esperanza me ayude a seguir hacia adelante.

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA.

Para que la gratitud sea consecuencia de dejarme llevar por Dios.
Para que pueda más Dios que la debilidad para responderle

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA

Para que la fe y la esperanza nos hagan dejar en segundo plano los sentimientos de temor o de temblor.
Para que sepamos corresponder a su Amor, siendo fieles.

DAME, SER FIEL COMO TÚ, MARÍA.


PRECES 4

MARÍA, MADRE DE LA ESPERANZA

Camina con nosotros. enséñanos a proclamar al Dios vivo.
Ayúdanos a dar testimonio de Jesús.
Haznos serviciales con el prójimo.

MARÍA, MADRE DE LA ESPERANZA

Aurora de un mundo nuevo.
¡Muéstrate, Madre de la esperanza y vela por nosotros!
Cuida de la Iglesia en el mundo, que sea transparencia del evangelio.

MARÍA, MADRE DE LA ESPERANZA

Vela por todos los cristianos:
Que prosigan confiados por la vía de la unidad
Como fermento para la concordia universal.
Vela por los jóvenes, esperanza del mañana.

MARÍA, MADRE DE LA ESPERANZA

María, ¡danos a Jesús! ¡Haz que lo sigamos y amemos!
Sólo Él es la esperanza de la humanidad.
Él vive con nosotros, entre nosotros, en su Iglesia.

MARÍA, MADRE DE LA ESPERANZA

Impulsa nuestras acciones y deseos para hacer que esta tierra
sea cada vez más habitable para todos.
Que no haya, en nuestras vidas,
Lugar para el egoísmo y la indiferencia.

MARÍA, MADRE DE LA ESPERANZA


PRECES 5

Proclamemos las grandezas de Dios, Padre Todopoderoso, que quiso que todas las generaciones felicitaran a María, Madre de su Hijo. Unámonos a cada petición diciendo:

QUE LA LLENA DE GRACIA INTERCEDA POR NOSOTROS.

Por la Iglesia Católica…, por todas las iglesias y comunidades cristianas: Para que el Espíritu Santo nos fortalezca, ilumine y guíe los esfuerzos hacia la unidad. Oremos.

Por los que viven angustiados y en la oscuridad por la falta de fe y de esperanza: Para que la Virgen María sea luz y camino que les ayude a superar su situación. Oremos.

Por nuestras familias, padres, abuelos, hijos, nietos…: Para que en tan importantes etapas de la vida permanezcan unidos a María. Oremos.

Por la paz en las naciones y los pueblos…, por el mundo que sufre: enfermos, ancianos marginados, los que pasan hambre, los que no tienen trabajo, los matrimonios mal avenidos… Oremos.

Por nuestra COMUNIDAD PARROQUIAL: Para que sea un hogar donde impere el amor fraterno… Y para que de la mano maternal de María llevemos consuelo a cuantos se acerquen a nosotros en busca de esperanza. Oremos.

Y por nosotros en particular: Para que sintamos la necesidad de orar, y a ejemplo de María vivamos en encuentro permanente con Dios. Oremos.

Escucha, Padre, las oraciones de tus hijos… Te las presentamos por intercesión del CORAZÓN DE MARÍA, a quien constituiste especial mediadora al lado de tu Hijo, Jesús, que vive y reina por los siglos de los siglos. AMÉN.

SACRAMENTOS DE INICIACIÓN CRISTIANA 18

 

El domingo de Pentecostés, 20 de mayo, a las 18.00 h., se celebrará en la Parroquia del Sagrado Corazón la recepción de los sacramentos de iniciación cristiana de 21 adultos de nuestra diócesis.

Ainhoa, Ana, María Teresa, Carla, Poliana, Darío y Luis se han estado preparando en nuestra parroquia a lo largo de este curso.

Nos unimos a su alegría y rezamos por ellos.


ALGUNOS TESTIMONIOS

 


¿Qué ha supuesto para mí este curso?

En el grupo nos acogimos todos y todas muy bien y enseguida la tarde de los miércoles se convirtió en un espacio de aprendizaje y tranquilidad, donde he aprendido a extrapolar metáforas de la Biblia a la vida cotidiana, como es el caso de “La semilla de mostaza”.

He apreciado valores que, en ocasiones, se olvidan, como pueden ser ceder, ayudar a quien tenemos al lado, incluso al que está al otro lado del planeta, con gestos y actos muy sencillos que parten de la humildad y respeto por uno mismo y por los demás.

Concienciarse de aspectos que parecen muy simples como tener en mente que todos los trabajos tienen la misma validez, aceptación y todos ellos son necesarios, sin enaltecer unos sobre otros.

En mi caso, para mi función como maestra y educadora, este curso me ha permitido aprender a “educar en valores” desde una posición mucho más cercana, desde la práctica e interiorización de ellos y a su vez a educarme y sumergirme en los mismos.

En cuanto a los tres sacramentos, suponen para mí un camino, una manera de sentir, pensar y formar parte de la comunidad cristiana desde el interior, perteneciendo a lo comúnmente conocido como Iglesia.

Ana.


Lo primero de todo quiero dar gracias a Dios, por la maravillosa experiencia de los últimos meses, todo empezó con una visita a la parroquia de mi barrio, sentí que era la hora de confirmar mi amor por Dios y mi Fe.

Algo me empujaba a ir lo más rápido que pudiese y no perder mas tiempo, sentí que Dios me había estado esperando para continuar mi camino con el a mi lado, así que un día por la tarde, salí de casa corriendo, quedaba poco para que el despacho parroquial cerrase, y no sabía cuando tendría una tarde libre para volver a ir, pregunté cuando y como tenía que hacer para confirmarme.

Un tiempo después tuve la primera reunión con los que serían mis compañeros y compañeras, una felicidad inmensa me inundó, sabía que había hecho lo correcto y que en ese grupo tenía una segunda casa.

En todo este tiempo he aprendido muchas cosas sobre lo que significa pertenecer a la comunidad cristiana, cosas que creía que sabia pero que en verdad no había ni siquiera vislumbrado la mitad.

Estoy segura de que todavía me queda mucho por aprender, por eso doy gracias a Beatriz, mi catequista, que ha rejuvenecido la semilla del querer ser mejor y vivir la vida según la vivió Jesús.

Sentir que formas parte de algo tan grande es algo muy especial , un grupo que te aporta muchas cosas buenas, como la comunidad cristiana, es algo que se debe cuidar cada día.

Los valores que poseo desde niña gracias a la Iglesia me han hecho ser quien soy hoy en día, por todo ello no podría ser mas feliz que dando el paso de confirmar todo aquello en lo que creo y en lo que baso mi vida.

Ainhoa


Hoy quiero despedirme de vosotros de una forma especial, quiero agradecerles no solo el empeño y sus ilusiones por transmitirme el mensaje cristiano, sino también la paciencia que han tenido con mi persona desde el primer día, la confianza que me han dado y el tiempo que me han dedicado.

 

 


Parece mentira que ya haya pasado el tiempo tan rápido desde aquella primera catequesis, la recordaré con mucho cariño y ahora me doy cuenta de todo lo que hemos crecido espiritualmente en este tiempo. Era una experiencia nueva para mí y los nervios eran los protagonistas, pero hoy hemos sustituido esos nervios por sonrisas.

Sabemos que en Jesús podemos encontrar un amigo y en Dios un Padre, que nos recibirá siempre con los brazos abiertos y con todo su amor, alegría y regocijo como en la parábola del hijo pródigo.

Lc 15, 24 “porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido; estaba perdido, y lo hemos encontrado. Y comenzaron la fiesta”

Huber


TESTIMONIO DE CARLA AGUIRRE

Hola…

Primeramente quiero agradecer al grupo de confirmación por acogerme, es un grupo muy bonito, integrado por personas buenas y con corazones enormes, a Beatriz por enseñarnos a conocer más a Jesús, a la iglesia, la religión y muchas cosas más.

Ahora os cuento mi pase por el sacramento de la confirmación. Como sabéis las personas que me conocéis y las que no, soy catequista en la parroquia Corazón de María, nunca pensé llegar a serlo, es algo que me llena de orgullo y estoy muy contenta por ello.


El domingo 20 de mayo recibimos el sacramento de la confirmación. Va a ser un día muy importante en nuestra vida cristiana donde nos comprometemos a seguir a DIOS, a pesar de nuestros errores.

También es el comienzo de una vida cristiana donde nos preparamos para convertirnos en soldados de Cristo y para estar dispuestos a luchar de palabra y obra por nuestra FE.

Ha sido muy difícil llevar la vida rutinaria y en ella dedicarle más tiempo de lo normal al Señor, pero ha merecido la pena.

Por mi parte estoy muy contenta de confirmarme y con ganas de mostrar los dones del Espíritu Santo y de comenzar a seguir de verdad a JESÚS.

ME DESPIDO CON ESTA FRASE

Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá. Mateo 7,7-8.


Mi nombre es Luis y soy agricultor en un pueblo cercano a Zaragoza.

Durante este curso he participado en la formación para confirmarme, en la Parroquia Corazón de María.

Fui bautizado de pequeño e hice la primera comunión. Cuando se confirmaron mis amigos no estaba seguro de querer hacerla, por lo que no la hice.

Pasados los años me he dado cuenta que confirmar la fe que me inculcaron mis padres era necesario en mi vida, así como volver al camino de los valores cristianos.

Este tiempo de catequesis con mis compañeros y con Beatriz, me ha servido para refrescar la Palabra de Dios que había escuchado en mi infancia y he aprendido que debo ayudar a los demás como buen cristiano.

Me ha encantado el grupo que hemos formado y echaré de menos los miércoles por la tarde, espero que nuestros caminos en la vida no se separen del todo.

Y por último, mi agradecimiento a todos los que me han ayudado en esta formación.

Luis.

 

 

 

GRACIAS POR EXISTIR

CARTA DE UNA ABUELA

Al tenerte a ti …. , aprendimos amar a alguien más que a nosotros mismos, fuiste un gran regalo después de tantos intentos que fracasaron.

Al nacer tus hijos, Eva y Jorge, el amor se ha multiplicado no por dos, sino infinitamente.

Llegasteis al mundo demasiado pronto ( 29 semanas es muy poco tiempo), pero Eva tenía unas ganas locas por salir así que a ti Jorge, con lo tranquilo que estabas dentro de tu madre, no te quedó otro remedio que salir también

Ha costado mucho llegar al momento actual, y las lágrimas que he derramado cuando no me veía vuestra madre, cuando estaba sola, solo lo sabe Dios nuestro Señor y yo.

Pero ya, poco a poco, todo va pasando y ahora es el momento de alegrías, de dar gracias al Señor porque nos habéis colmado de Amor y Bendiciones.

A partir de este instante nos toca a todos el acompañaros en vuestro aprendizaje. Os van a pasar cosas muy buenas, que os encantaran, y otras menos buenas de las que aprenderéis algo, pero siempre vamos a estar a vuestro lado, riendo cuando estéis contentos, consolándoos cuando tropecéis y malcriándoos, que para eso somos abuelos; a vuestros padres les tocara el ponerse serios.

Y nada más, gracias por existir y hacernos el regalo más grande que nunca habríamos podido imaginar y encima por partida doble.

Vuestros abuelos que os quieren

BEATRIZ: 25 AÑOS DE VIDA RELIGIOSA

Gracias, Beatriz por contar con nosotros y dejarnos acompañarte en esta celebración. Nos sentimos gozosos de poder celebrar contigo tus veinticinco años de vida religiosa


Nombre: Beatriz

Congregación: Hermanas de la Caridad de Santa Ana. Fundadores: María Rafols y Juan Bonal.

¿Dónde vives? Aquí en Zaragoza, en la comunidad Mambré, con cuatro hermanas más y trabajo en el Colegio Santa Ana, donde cada día recibo una llamada para dar vida, para enseñar, para aprender mientras enseño, para educar y educarme. Evangelizo educando.

¿Cómo fue? Buceo en mi interior para buscar en qué momento empecé a barruntar la presencia de Dios en mí y descubro asombrada que Él desde siempre ha estado conmigo: Acompañándome, guiándome, iluminándome…

Mi despertar religioso comenzó en mi familia. Aprendí a rezar, rezando. A celebrar la Eucaristía, celebrándola cada domingo con mi familia, en la Parroquia de Santa María la Mayor de Épila, y aprendí desde muy pequeña a querer a la Virgen bajo dos advocaciones: Ntra Señora de Rodanas y Santa María del Pilar.

También puedo decir que mi fe ha crecido y se ha fortalecido en las distintas parroquias a las que he pertenecido.

¿Qué celebras? 25 años de vida religiosa. Entré en la congregación el 27 de febrero de 1993. Renuevo mi sí, mi seguimiento de Jesús, mi compromiso como mujer consagrada.

¿Dónde lo celebras? En la parroquia Corazón de María, parroquia a la que pertenezco y en la que colaboro como catequista.

¿Qué agradeces a Dios? Es bueno dar gracias y tenemos tantos motivos.

Gracias por el tiempo de formación aquí en Zaragoza. Me encanta nuestro carisma, totalmente actual, vivir la hospitalidad.

Gracias por los 4 años vividos en Borja (Diócesis de Tarazona).

Gracias por los sueños que se hicieron realidad, 10 años en Mbini (Guinea Ecuatorial).

Gracias a Dios, también, por mi vuelta a Zaragoza, cerca de mi familia, acompañando y cuidando a mis padres.

Gracias a todas las personas, hermanas y amigos, que en este tiempo se convirtieron en familia. Gracias a todos los que os unís a mi acción de gracias.


SU ESTANCIA EN GUINEA

Gracias por los sueños que se hicieron realidad, 10 años en Mbini (Guinea Ecuatorial.


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BODAS DE ORO MARISA-ANTONIO

Después del Evangelio

A esta Eucaristía unimos la celebración de los 50 años de amor y de perdón

Ellos quieren en presencia de Dios, hacer partícipes a sus familiares y amigos de su 50º aniversario de Bodas.

Cincuenta años de lucha, comprensión, entrega generosa, de pequeños triunfos y fracasos, cincuenta años por encima de todo de saber amarse y perdonarse.

Y han decidido celebrarlo en esta comunidad a la que tantas horas han dedicado para que el Señor que sembró la semilla del amor en sus corazones hace 5o años, siga siendo la fuerza de su amor y continúen caminando por la vida cargados de ilusión y esperanza.


CONSENTIMIENTO

MARISA Y ANTONIO: Habéis venido aquí para que Dios garantice con su sello vuestro amor, ante la comunidad cristiana, familiares y amigos.

Un día fuisteis consagrados en el matrimonio; hoy, Cristo va a bendecir de nuevo vuestro amor, y os enriquecerá y dará fuerza para que sigáis siendo fieles al amor que hace 50 años os prometisteis.

ANTONIO, ¿sigues queriendo a MARISA como esposa y deseas renovar, ante Dios, la comunidad cristiana, familiares y amigos, el amor, la fidelidad y la entrega que hace cincuenta años le prometiste?

MARISA, ¿sigues queriendo a ANTONIO, como esposo y deseas renovar, ante Dios, la comunidad cristiana, familiares y amigos, el amor, la fidelidad y la entrega que hace cincuenta años le prometiste?

El Señor que hizo nacer y crecer en vosotros el amor confirme este consentimiento mutuo que habéis manifestado.



ACCIÓN DE GRACIAS

En el momento de la acción de gracias hubo varias intervenciones. Un niño les dedicó este texto.

Mis papás me han dicho/ que 50 euros /son muchos euros para un niño.

Hay una niña en mi cole/ que por las tardes/ se lleva un euro en el bolsillo/ y con lo que compra/ meriendan ella y su hermano pequeño/ antes de venir a catequesis.

He pensado/ que con 50 euros/ podría comprar cada día,/ meriendas para 100 niños.

Yayos Marisa y Antonio,/ he intentado multiplicar 50 x 50 años, por 100, por…./ Perdonad…. Pero me he perdido….

La profe me diría que no lo intente, /que eso se estudia en el curso siguiente… /que todas esas multiplicaciones dan… / INFINITO.

Me imagino yo /los infinitos detalles de amor, / de caricias, /de sonrisas, / de cariño/ que habréis repartido a lo largo de estos 50 años.

Gracias por vuestro ejemplo, /felicidades por este día.

Con vosotros, /los pequeños y mayores que estamos aquí hoy, /hemos aprendido / que es muy importante saber multiplicar./

Traemos aquí un diploma /que entregan en catequesis /a los niños que se saben las oraciones.

En nombre de todos los niños os entregamos este diploma que dice:

DIPLOMA /OTORGADO A LOS YAYOS MARISA Y ANTONIO, /que aunque no se saben aún todas las oraciones, /han aprendido a multiplicar por 50./

Felicidades.


Dar gracias en nombre de toda mi familia por nuestros padres,
Antonio y Marisa, que celebran sus bodas de oro.

En este día tan señalado queremos dar las gracias a nuestros
padres, por darnos la vida, por darnos una infancia feliz y por
enseñarnos, con vuestro ejemplo, el significado y el valor del
amor, de la familia y del trabajo.

Cincuenta años dan para mucho y durante ellos nos hemos
sentido unos hijos queridos y apoyados por vosotros tanto en la
infancia como a lo largo de toda la vida y esperamos que una parte
de lo que nos habéis enseñado lo hayamos interiorizado y
trasmitido a nuestras propias familias.

Muchas gracias a los dos y que sigamos celebrando muchos años
que estamos juntos y que nos queremos.

Gracias por esta ahí y ser siempre un ejemplo para todos nosotros.

Vuestro hijo


BENDÍCELOS, SEÑOR

Bendícelos, Señor,
coronaron las cumbres de oro
en la dura escalada de la vida,
caminaron con tesón día tras día
viviendo la alegría y la tristeza compartida.

Hoy están aquí, como el primer día,
con sus manos unidas, con el alma repleta de amor,
una leve sonrisa en los labios
y los ojos henchidos de emoción.

Han llegado hasta aquí apoyándose el uno en el otro,
han gastado sus fuerzas y su aliento,
porque, cuánto amor, cuánto dolor
les costó llegar tan lejos.

Aquel «si quiero» emocionado y tierno
con que ante Ti se unieron de por vida,
lo repiten ahora despacito, en silencio,
con la misma ilusión, la misma entrega,
el mismo ardor que les unió aquel día.

Bendícelos, Señor, porque han luchado,
porque han llorado y han reído juntos,
porque en su mano floreció la semilla que les diste,
porque se han amado día a día,
porque se aman hoy con gran ternura,
porque el amor alumbrará el resto de sus días.

Angelines